sábado, 30 de noviembre de 2013

QUE NO TE QUITEN LOS SUEÑOS...

- 63 -

(Para Ana Belén Saavedra...)

Para ti, que me traes el calor de la primavera,
aunque yo te mire siempre en otoño...

Caminas entre el olor a tierra mojada, tan llena de sueños.
Impregnada de naranjas, rojos, azules... con tu color natural.

Tu risa entera me canta ahora, desde la ventana de mi vida...
Mientras me acerco a ti vas irradiando ternura,

Se desprenden del día sus rayos y forman el áurea de tu alma:
Tibia, templada, cálida... como un hogar,

Porque tienes el lugar donde refugiarme cuando me encuentre sola,
en una mezcla de sabores exóticos, a café, a pimienta, a rosas con miel...

Con tus ojos oscuros derritiendo la candidez,
a veces, con lágrimas que se escapan en un suspiro de invierno...

De sueños tienes hechas las palabras que se van enlazando,
para que, al final, te envuelva en su significado,

Convirtiéndolos en verdad, en mágicos,
acariciándolos con las manos, sellándolos con un beso,

Para que los sientas, los vivas, y los guardes.
Para que no te quiten nunca los sueños... 

 

viernes, 29 de noviembre de 2013

Ojalá estuviera aquí...

- 62 -

Daba vueltas y vueltas y no iba hacia ningún lado...
sin darme cuenta me oprimía, me cerraba puertas y no dejaba escapar mi voz...

Viejas notas de una canción, suenan y resuenan, rebotando en mis oídos,
pero no puedo sentir tu presencia porque estás muy lejos.

Estaba prisionera de mí misma, porque no me dejaba volar...
Por eso esta canción me devuelve a ti. Girándome para verte desaparecer de nuevo,
entre las voces y el sonido que se extingue lentamente entre mis auriculares
cuando me evado y entro tan sola, tan pequeña, tan triste...

Hasta que te encontré entre la gente que iba y venía sin saber hacia donde.
Yendo contracorriente me crucé contigo en nuestro espacio particular,
encendiendo otra vez la luz de los recuerdos...
y ese eco que me trae tu mirada, para no perderme.

Quiero dormir contigo y soñar cómo vuelan sin razón nuestras manos unidas...
Te quise, creo que te quiero tal y cómo eras...como antes,
porque ahora no te conozco, no reconozco tu voz, hace tiempo que se fue...

Aún siento mis manos temblar cuando te presentí,
aún siento el fuego que me abrazó esa tarde de otoño,
cuando empezaban a caer las primeras hojas
y noté tu presencia como en un susurro...

Ojalá...ojalá estuvieras aquí, para tenerte y poder besarte.
Te quiero, a veces, entre el pensamiento, cuando creo que mis sueños son contigo,
que están para ti, entre el frío que viene y me hiela los huesos, para creer en tu calor.
Algún día... cuando te vea y sonrías.



DÍA 30

- DÍA 30 - 

He corrido los 5 km. de rigor, en un tiempo bastante aceptable. 
Mientras corría, iba pensando en qué solitario está el parque los viernes. No hay casi, casi nadie... dos o tres personas... y además, las tardes son cortísimas y se me estaba echando encima..., el sol se fue en un abrir y cerrar de ojos; 
iba pensando que si fuera sola, acabaría por sacar algún relato, de estos melancólicos, de mi cabeza... pero... NO IBA SOLA.... mi amiga Concha Zaragoza, ha vuelto a salir a correr conmigo... 
Por lo que ya no estaba tan solitario el parque...: 

Hemos visto a dos chicos de lejos corriendo... y a Concha no se le ocurre otra cosa que chistearlos... "Chist, chist" – dice – uno de ellos ha mirado hacia nosotras y ha seguido corriendo, y comentamos: “son unos yogurines... es verdad...”.

Un poco más adelante, nos cruzamos con un señor mayor, mayor (no era mi viejino, menos mal), y le dice: “Buenas tardes!!!!”, toda educada ella, pero lo ha dicho en un tono un poco alto, que se han debido enterar los habitantes de los pisos de la Madrila; y el hombrito nos ha mirado con cara de susto y ha contestado cortesmente pero con suspicacia... como diciendo: “¿conozco yo a estas dos?”, que hasta se ha quedado mirándonos pasmado. La verdad es que me he asustado hasta yo... 

Y por último, con todo el sitio que teníamos hoy para nosotras solas, en un par de ocasiones, nos hemos chocado al querer tirar, una hacia la derecha y la otra hacia la izquierda... que menos mal que no había nadie más, que si no...pensarían que nos falta un tornillo, porque, claro, es que yo soy la asidua al parque... 
En fin, que es una gozada correr con mi amiga!!. Hasta el lunes. 
Espero que no haga tanto frío como hoy...

jueves, 28 de noviembre de 2013

PRIMERA PARTE (tengo frío...)

- 61 -
(PRIMERA PARTE)

Tengo frío en los besos que ya no te doy, sin recordar cómo fueron,
agrietándose mis labios, congelándose el deseo,
sin palabras que decir, sin nada, como muertos...

Tengo frío en la ventana, por donde se escapa el viento,
que me trae la angustia de saberte tan lejos,
dejando las puertas abiertas, llenándose el cielo...

Tengo frío entre los dedos, que acarician las teclas
que no expresan lo que siento,
y se llevan mi alegría dejándome sola, sin puerto...

Tengo frío en las palabras que no te conocen,
sin llegar a ti, quedándose vacío el papel
donde las letras se enredan en el suelo...

Tengo frío en los sueños, porque cuando te fuiste
quedaron helados mis suspiros cuando duermo...


SEGUNDA PARTE (llenarme con tu alegría)

- 61 -
(SEGUNDA PARTE)

Llenarme con tu alegría para cantarle al viento,
tener tu calor y no dejarte marchar,
soñando contigo, besando tus labios, bebiendo tu aliento...

Llenarme con tu calor, cogiéndolo de tus manos,
sintiéndote pegado a mi corazón,
enredando tu piel en mi cuerpo...

Llenarme de tu calor, y no tener frío nunca más,
quitarme el abrigo, sentirme desnuda,
tener tu calor y no pensar en nada, después de los sueños.

Llenarme con tu amor y sentirme amada,
esperándote al final del camino, mirarte,
tener tu calor y llevarme tu música,

Llenarme de tu calor y bañarme en tu risa,
quererte para tenerte, coger tu calor y abrigarme con él...



miércoles, 27 de noviembre de 2013

NO ESCUCHO TU VOZ

- 60 -

Como no escucho tu voz, no sé perfilar tu tono, no siento las palabras entre veladas, ni observo tus gestos cuando hablas.
Como no escucho tu voz, me confundo con las ideas, y no entiendo lo que dices, me enredo entre renglones y me pierdo en el margen del papel, sin saber si lo que dices tiene un sentido para mí.

Yo misma, no logro hacerme con los pensamientos que escapan hacia las teclas, a veces muy cortas de miras...
Porque, al observar después, me quedo vacía. Sé que no expreso lo que siento, podría decírtelo todo de otra manera.

Me da miedo descubrir que lo que intento plasmar con las letras, no llegue con fluidez a tu corazón...
Como si de una conversación deprisa se tratara, no leo entre líneas, porque no escucho tu voz y no sé si sabes...

Me gustaría poder esparcir las palabras entre nosotros y que se recogieran en el orden exacto que marcan mis latidos.
Porque a veces, no quiero decir lo que escribo, tal vez lo expresé mal, o no era el momento...

Parecía que mi corazón se desnudaba definitivamente... y al final, quedó en nada.
No escucho tu voz y me desconcierta, me confunde, me amarga y no me atrevo.
Quisiera poder liberar mis sentidos, mirarte a los ojos y escuchar por fin tu voz...

DÍA 29

- DÍA 29 -

He salido a correr sin mi compañero Edmundo. Se conoce que estos fríos no le sientan bien y estaba indigesto... En fin, no tengo pruebas documentales, pero los 5 km me los he chupado hoy en 30´53 minutos. OLÉ!!!! 
Es que hoy no me dolía nada: ni barriga, ni costado, ni cabeza, ni cadera, ni pies, ni nada. 
Empecé con un frío de mil demonios, pero a medida que fui cogiendo el ritmo, empecé también a disfrutar... 
Me he cruzado con gente nueva, la mayoría iban corriendo... otras andando. De los habituales sólo he visto a mi viejino, pero de lejos. Cuando yo llegaba, él se iba y no me ha visto... pero yo a él sí y no me explico cómo podía moverse... 
Llevaba lo que parecían 20 chambergos unos encima de otros, una bufanda, un gorro y sus zapatillas de cuadros de estar en casa. Un cuadro... Para que luego él se ría de mí todo lo que quiere de las pintas que yo llevo!!! Hombre ya!!. 

El suelo estaba lleno de hojas y es un peligro, la verdad. Sobre todo para las patosas, porque yo he resbalado con una y he estado a punto de “jocicar” (que ya expliqué en una ocasión que “jocicar” significa “llegar con el hocico -jocico en extremeño- al suelo”) y las piernas, en un arrebato de buen juicio, han sabido llegar a un acuerdo entre ellas y guardar correctamente el equilibrio y no dejarme caer. 
Lo peor de estas cosas, es que me da la risa, y yo tengo una risa muy escandalosa... y como iba con Metallica a tope, con los cascos puestos, no me he dado cuenta de que he soltado una carcajada, hasta que no he visto que los que pasaban por allí se tronchaban de la risa!!!. 
Al menos, era mi última vuelta y no he tenido que cruzarme con ellos otra vez... en fin, hasta el viernes!!!

martes, 26 de noviembre de 2013

AYER...

- 59 -

Ayer supe de ti, y el cielo estalló en mil pedazos. 
Te tuve un momento, para mi, entre mis dedos...
Aunque fugaz, casi sin quererlo... Te retuve un instante, 
en el que todo se volvió de color dorado...
Y mi pensamiento se escapaba entre el aire tibio, como una señal.

Mis latidos giraron hacia tu recuerdo, 
como cuando éramos pequeños,
llenando mi pecho de una emoción que reconocía y creía olvidada.
Mis manos temblaban y quería decir tanto con tan poco tiempo...

Las palabras se enredaban y no sabía qué pensabas en ese instante; 
compartiendo un espacio,
pequeño, sin formas, volátil...; 
estando en otro lugar, donde sólo éramos nosotros,
creyendo que tú estabas sintiendo lo mismo...; 
y a lo mejor me equivocaba.

Cómo se me encogió el corazón, 
al saberte tan cerca pero tan lejos,
en ese momento en el que eras solo para mí; 
aunque no fuera cierto...y tu voz no me alcanzara.
Después de todo, estamos donde nadie más sabe, donde nadie más llega...

lunes, 25 de noviembre de 2013

PARA ELLOS, PERO SOBRE TODO PARA VOSOTRAS...

- 58 -

Por haber sido MUJER, he tenido que aceptar que me releguen a un plano inexistente, sin contar con mis opiniones, mis sentimientos, mis aspiraciones.

Por haber sido hombre, he podido hacer prevalecer mis ideas, mi valor, mi sabiduría, mi autoestima.

Por haber sido MUJER, he tenido que soportar vejaciones de todo tipo, he tenido que dejar que me marquen a fuego, que me quemen, que me insulten, que me asesinen...

Por haber sido hombre, he podido tener a una persona a mi lado, para que hiciera todo aquello que yo no quería, que no me he molestado en aprender, que trabajaba para mí sin tener que pagarle un sueldo.

Por haber sido MUJER, he tenido que asimilar que mi papel era el de estar bajo la supremacía de otro ser humano más fuerte físicamente, con el que tenía que convivir todos los días.

Por haber sido hombre he podido marcar a la persona que vive conmigo de cualquier manera, ya sea en su cuerpo o en su alma. Con mi fuerza o mis palabras y hacerla mía, escudándome en palabrería inútil y en gestos sin sentido.

Pero...

Por ser un hombre, no debo permitir que nadie imponga su criterio con la violencia, pensando que es un ser más débil y que lo hace por su propio bien.

Por ser MUJER debo gritar mi libertad al viento, debo hacerme oír por encima de las voces que pretenden apagarme, escudándose en la religión, en la costumbre, en la ignorancia...

Por ser un hombre, no tengo que vivir creyendo que puedo burlarme del físico de otro ser humano, de creer que todo es sexo, y de que yo soy mejor por el simple hecho de poseer atributos físicos que otras personas no tienen.

Por ser MUJER tengo derecho a ser un individuo con las mismas necesidades, las mismas obligaciones y deberes como cualquier otro, sin importar la talla de mi sujetador o lo ceñido de mis pantalones.

Por ser un hombre, debo defender a todos los seres humanos de agresiones, vejaciones e insultos.

Por ser MUJER puedo ser yo misma, sin sentir vergüenza, ni saberme inferior, estando orgullosa de mi persona, no dejando que nadie discrimine a nadie...

Por todo ello, por ser una PERSONA, debo proteger la libertad de los que me rodean y luchar por un mundo donde todos se respeten, se acepten, se valoren, se permitan crecer como INDIVIDUOS enteros sin estereotipos que nos encadenen y nos conviertan en algo inferior a nuestra condición de seres HUMANOS con capacidad de pensar, de sentir... en definitiva de SER.


DÍA 28

- DÍA 28 - 

Jo! No he podido acabar los 5 km. IMPOSIBLE!!!! y ¿sabéis por qué? 
Pues muy sencillo, veréis:

Ayer, como muchos sabéis, hice un perolo de migas extremeñas, que me traje del campo, para desayunarlas durante esta semana. 
Tenía muchísimas ganas de migas, porque el año pasado, con tanta lluvia, paré poco por el campo y a mí me gustan hacerlas a la antigua usanza, es decir, al calor de la lumbre. 
Mis hijos, para cenar anoche, se comieron casi todo el perol, aunque tuvieron la deferencia de dejarme unas pocas. 
Yo no cené porque había quedado saturada de panceta, chorizo, carne... y todo lo que se pueda uno comer en el campo. 
Esta mañana, me levanté con hambre y he desayunado un plato inmenso de migas. 
Toda la mañana, en el trabajo, he estado pesona, pesona... las migas se habían aposentado en mi estómago y me producían malestar... He cometido el error de estar bebiendo agua todo el rato, y claro, con el agua esas migas han doblado su volumen y ya no me cabían. 
He estado levantándome y sentándome toda la mañana. 
Cuando he llegado a casa, me tenían un plato de patatas con carne, un poquito picante (como a mí me gusta), encima de la mesa... no tenía intenciones de comérmelo entero, por el dolor de estómago, pero ¡qué queréis que os diga! Yo he nacido “Carpanta” total, y me lo he comido entero. Mi estómago ya no es el que era, después de haber adelgazado tanto... 
Me he tomado un “Almax” y listo!!. 

He salido a correr.... 
Oye!, más bien...! 
hasta que ha llegado un momento en que he sentido cómo las migas del desayuno, se han revolucionado en mi estómago y han empezado a saltar y a bailar... ¡con una alegría...! me llegaban hasta la garganta, y volvían a bajar por el esófago cantando al son de mis zancadas. 
Según daba un paso... las migas subían; daba otro paso, las migas bajaban... 
Delante de mí, el “Jerry Lewis” que iba corriendo a “todo me té”, y a mí me pesaba aquello como una losa... 
Así que, he tenido que parar, porque si no, lleno el Parque de migas. 

Lo peor es que creo que no las voy a volver a comer por lo menos hasta el año que viene... snifff!! “Ahjita” me he quedado. Hasta el miércoles!!!

domingo, 24 de noviembre de 2013

POR MIEDO A...

- 57 -

Por miedo a hacerte daño, fundí mi corazón en brasas para estar entre tus brazos, queriendo ser beso y quedarme en tus labios.

Por miedo a sentirte otra vez, apagué mi deseo en lágrimas, queriendo estar en tus ojos y hundirme contigo entre la marea y el mar,

Por miedo a no encontrarte, me perdí en ese bosque ocre que tenías, queriendo ser un cuerpo bailando entre la música, teniéndote dentro en un vaivén...

Por miedo a que no me quisieras, me escondí entre el sol y la niebla, queriendo gritar tu nombre al viento, escuchando tu voz sin que nada importe después...

Por miedo a quererte yo, olvidé mis sentimientos en el camino..., queriendo que la música me transportara, sin cuerpo, sin esfuerzo, elevándome libre, sin ataduras ni vestidos...

Por miedo a ser yo, me transformaba en las notas de una guitarra, limpia y nítida tensando mi corazón, mientras te vas, alejándote de todo, con tu voz que me lleva y me trae.

Por miedo a no verte, mi alma se desgarra y los trozos de mi corazón se esparcen donde tú estés, con las manos extendidas, hasta aprisionarte y no dejarte escapar otra vez.



EL DEL BICHITO Y EL GATO

5

Era un insecto y estaba orgulloso de serlo.

Vivía calentito entre la maleza del pelo de un gato blanco que no se había molestado en quitárselo por pura pereza. 
De todas forma, el bichito no era excesivamente empalagoso, casi no molestaba, salvo lo estrictamente necesario para su conservación y necesidad. 
Daba poca guerra al gato, y por eso éste no se había percatado aún de su existencia. 

Pero hete aquí, que estando tranquilamente el gato al sol, el insecto debió de moderle un poquito para calmar su sed, y el gato, raudo y veloz, lo trituró entre sus dientes, despejando su bonito pelo de inquilinos no deseados y que encima, no pagaban alquiler...

EL DE LOS GALGOS Y LA LIEBRE

4


Corrían por el campo, pero parecía, desde lejos, que no sabían muy bien a dónde iban. 
Eran dos, con patas largas, cuerpo esbelto y fibroso. Dos galgos ejemplares, educados para hacer su trabajo con precisión, era su manera de vivir y sabían hacerlo muy bien. Corrían con esa elegancia que solo los de su raza sabían hacer. Saltaban vallas, recortaban arbustos, zigzagueban en pos de una estela blanca... 

Un punto en el horizonte les indicó dónde estaba... Sólo se veían las orejas, entre la hierba, agazapada, pensando en una estrategia para escapar. 

De pronto, uno de los galgos se paró en seco. El otro le miró extrañado, sin saber, pero lo imitó, por instinto. 
Movió lentamente la cabeza hacia su presa, por un segundo la había visto moverse. 
Un escalofrío recorrió su cuerpo y salió detrás de la liebre. Pero ésta ya estaba esperando la reacción del galgo y estalló en un controlado salto, escapando delante de sus narices como si aquello lo hiciera todos los días... 
Su corta figura se perdió en el horizonte, dejando a los perros frustrados, con un palmo de narices. 

Esta vez, la liebre, escapó de una cazuela segura.

sábado, 23 de noviembre de 2013

DE ALGUNA MANERA

- 56 -

No traes mi nombre en los labios,
ni las ganas de mí en tus sueños.

Ya no te noto si me lees,
ni si estás cerca o lejos, conmigo o sin mí,

Quisiera que estuvieras aquí,
pensando lo mismo que yo siento,

De alguna manera te echo de menos,
Te tuve una tarde, y hoy ya no te tengo,

Pero recuerdo que miré el cielo y te sentí a mi lado,
cuando tus palabras no dijeron que me querías

Fue cuando tus labios me rozaron, solo una vez,
en un beso que me confundió.

Nuestras manos se cruzaron, sin llegar a tenernos.
No quería entonces, no entiendo el qué,

más tarde me equivoqué y te perdí un día...
en el parque, cuando llenaste de tiza mi corazón.

viernes, 22 de noviembre de 2013

PORQUE YA NO ESTÁS... (para mi madre)

- 55 -

El viento me devuelve tu voz, porque ya no te tengo...
No tengo tu risa, que me llevaba a través del tiempo, desde los juegos de niña, las oraciones antes de dormir y las canciones que cantábamos en el camino...

Me devuelve tu alegría, porque ya no estás,
las ganas de vivir que estallaba en tu corazón, dándome el beso que ahora se perdió, llevándoselo la noche y quitándome parte de mí.

Me devuelve tus palabras, porque no te escucho...
entre los libros que leías, en el hogar que construiste lleno de sentimientos y los sueños tejidos entre las paredes.

Me devuelve la música que envolvía tu persona, porque ya no te veo,
llevando el compás de mi vida, sin tener enfados inútiles, enojos sin sentido y riñas vacías.

Me devuelve el sentido de vivir, porque ya te fuiste...
Formando parte de tu persona y de tu corazón. Sintiéndome pequeña e insignificante.

Me devuelve el dolor de creerte olvidada, porque el tiempo borra tu imagen y tu reflejo, aunque no tu esencia, mientras dure mi vida.

Me devuelve tu persona, porque estás en mí, siendo yo, dándome la vida otra vez, porque tengo tu recuerdo, te tengo a ti.

Por eso una madre no se muere del todo,
Por eso una madre no se muere nunca...


jueves, 21 de noviembre de 2013

NO QUIERO QUE ME DIGAS...

- 54 -

No quiero que me digas lo que tengo que hacer, ni sentir, ni pensar...
soy como el aire, tan volátil e impredecible,
soy como un tornado que se cierne sobre ti, traspasando los sueños y hacerlos míos.

No quiero que me digas qué decir, ni cantar, ni gritar...
soy como el agua de la lluvia, calando tu rechazo y sin sabores,
soy como una tormenta en el verano, mojando tus deseos y hacerlos míos.

No quiero que me digas cómo tengo que andar, ni correr, ni bailar...
soy como el estruendo del mar, cuando furioso choca con la orilla rocosa,
soy como un terremoto destruyendo tu vida y haciéndola mía.

Sólo quiero que me digas que tengo que quererte, abrazarte y tenerte...
soy como la brisa, como el rocío, como la música, sintiendo el calor de tu mirada,
y tus besos en mis labios, haciéndote mío.



AHORA SOY PARA MÍ

Caminaba por la calle y estaba oscuro...
mis pasos resonaban en el pavimento,
y solo se veían sombras.

Me encontraba solo y no sentía nada,
tal vez el peso de mis actos y mis pensamientos.

Los ojos vagaban por las paredes sin ver,
y sin embargo me sentía libre.

Pasó por mi cuerpo el escalofrío de la despedida,
la amargura que me brindó el adiós.
No fue un “hasta mañana”, fue un “hasta siempre”.

No quiero llorar, no quiero que se lo merezca.
Sus abrazos eran fríos y me alejaban poco a poco de mi pasado.

Estaba oscuro y caminaba solo,
y el aire que entraba en mis pulmones se volvía cada vez más pesado.

Hasta que mi mente se paró de pronto.
Sólo había sombras y no sentía nada.

Vaciándome lentamente de su recuerdo,
iba apoderándose de mí la esperanza y el calor.
Cruzando las manos intenté pedir volver a ser yo.

Empezó a entrar la fuerza en mis manos
y el valor se extendía por mis piernas obligándome a caminar.

Las luces del alba se encendieron en mi mente,
llenándolo todo de color, sabiendo que nunca más estaría solo,

por fin se desvaneció la noche y el día entró,
con su risa alejando de mí todo lo demás...

Ahora sí, ahora soy yo otra vez, ahora soy para mí.

miércoles, 20 de noviembre de 2013

ESPERANZA

- 53 -

Siento alegría, por tenerte como amigo aunque no nos hablemos,
Alegría, por sentir tan profundo las emociones del mundo.
Alegría, por ensancharse mi pecho al quererte, por ver siempre el color blanco entre las sombras.
Alegría, por vencer mis miedos ante los obstáculos del camino y dar antes que recibir.

Siento calor, cuando mis manos se llenan de música, y mis sueños te tienen toda la noche.
Calor, por las sonrisas que voy recogiendo entre tantas lágrimas, necesitándote a mi lado durante el viaje.
Calor, cuando tu mirada me envuelve y me siento completa, bailando entre la niebla de nuestros recuerdos.
Calor, cuando siento que me besas en el alma y me aturden los sonidos de tu silencio.

Siento paz, al mirar la noche que me devuelve las estrellas de tus ojos y me hundo en ellos ahogando mi tristeza.
Paz cuando camino por el parque escuchando los latidos de mi corazón y el pulso de la naturaleza,
Paz al estallar en mil trozos los retazos de mis sueños, aunque no sean verdad.
Paz cuando pienso en el vaivén de las olas empujarse unas a otras, en un torbellino de sensaciones.

Siento amor, cuando me rodeo de ti en mi mente, y recuerdo todo lo que no hemos tenido.
Amor, cuando esa palabra se queda pequeña en mi boca y rebota en mi alma.
Amor, al recordarte como eras entonces entre los días perdidos y los atardeceres azules, cuando sólo nos teníamos el uno al otro.
Amor entre nosotros, cogiéndonos las manos, enredándonos con un nudo de emoción en nuestras gargantas y mirando al infinito...

Siento esperanza, porque no todo lo que tengo, es lo que quiero ahora,
Esperanza, de una vida contigo desde siempre, para siempre, para ti, para mí...
Esperanza, por tener unos sueños que se hagan realidad, por una vez, sin tener que pagar un precio a cada paso.
Esperanza de unos besos que no nos dimos y no recordamos... para hacer una verdad de un pensamiento, para ser yo misma, contigo, por fin.


DÍA 27

- DÍA 27 - 

Este Edmundo está como una cabra... resulta que ya tengo cogida la distancia a los 5 km. Y siempre hago el mismo recorrido, por lo que siempre será el mismo trayecto, digo yo... pues no. 
Hoy, se conoce, que el parque ha encogido, porque en vez de acabar donde siempre, he terminado muchos más lejos... no se... me estaba dando la sensación que la música que iba escuchando iba como muy lenta
Justo cuando he terminado y he parado a Edmundo, la música ha ido más deprisa... en fin, esta tecnología falla a veces, supongo. 

Por otro lado, hay una chica, que corre también por el parque, que ya he visto un par de veces en estos días. 
Tiene un cuerpo extraño, las caderas muy anchas y poco pecho. Lo que se llama “cuerpo de botella”, pero muy exagerado. El pelo rubio, muy, muy, muy largo, recogido en una coleta en la coronilla. Va siempre conjuntada en su atuendo para correr, las mallas negras, ajustadísimas, tan ajustadas que le hacían lorzas en los molletes del culo, el coletero negro, la camiseta rosa y negra... en fin, muy mona ella. 
Corría delante de mí, y yo la veía, con esas lorzas, a un lado: uno, dos. Al otro: tres, cuatro... y esa coleta inmensa al compás: derecha (flash, flash), izquierda (flash, flash).
Corriendo como con las rodillas juntas y los pies hacia los lados (sí, así como cuando imitan los chicos a las chicas corriendo). 
Los tres o cuatro viejinos que iban andando, todos a la vez, mirando para atrás, con los ojos saliendo de sus cuencas... 
En fin, que ya no la vuelvo a ver hasta el final de mi recorrido, y me la encuentro desencajada, con los pelos alborotados, doblada, respirando entrecortadamente, sin aliento, y justo cuando he terminado y llegaba a su altura, así que la he ayudado un poco a recuperarse y ¡ya tengo una amiga nueva!!! 

Me ha dado lástima, la pobre, porque me he acordado de mis primeros días...jejeje. 
Hasta el viernes!

martes, 19 de noviembre de 2013

VOY A ENCONTRARTE

- 52 -

Voy a encontrarte, para calmar mi ansiedad, ahora que estoy abrazando tu recuerdo.
Quiero sentirme segura, dentro de mi burbuja transparente,
cálida y llena de buenas vibraciones...
donde tu voz me llega como una caricia y me baña por las mañanas.

Voy a encontrar tus labios para poder besar el amanecer contigo,
Voy a necesitar tu calor para defenderme del frío de esta tarde.
Quiero sentirme segura, entre tus brazos y entre mis sueños.
Imaginando que estás conmigo, una noche más.

Sentirme entera cuando mire tus ojos y me hunda en tu mirada, tan profunda y sincera...
Voy a encontrar tus palabras y enredarme en tu voz,
hablando de nuestras cosas, como nunca lo hicimos,

Voy a encontrar el momento de sentarme contigo para ver las estrellas,
como una vez ya hicimos...

Sentirme llena de recuerdos que un día recuperé, y crecer un día más,
emocionarme y llorar... como nunca hice.
Sentirte a mi lado, sin esperarte, veladamente, hasta el final.

Voy a encontrarte para perderte, mil cosas me separan de ti,
mil imanes me arrastran hacia ti, deseo, anhelo, como en una canción.

Quiero sentirme viva, sabiendo que tú no sabes lo que siento,
quiero sentirme tú... para saber qué piensa tu corazón, por una vez,
Voy a perderme entre mis ilusiones de creer que sientes lo mismo,
sabiendo que esa verdad se da sólo en mí.

Quiero poder despertar y encontrarte, donde nunca te perdí.



lunes, 18 de noviembre de 2013

NO QUIERO ESTAR AQUÍ

Ya no quiero estar más aquí, donde hoy nada me comprende y la tarde sólo me da tristezas y sinsabores. 

La música que escucho me provoca añoranza y el color del día me devuelve sólo sombras... 

No quiero estar aquí, sólo pensando en ti y en lo que sería en otro mundo paralelo, donde pudiéramos quedar y vernos, sentirnos, querernos... 

Estoy cansada y triste, porque no voy a verte más. Te has ido, como siempre, dejándome sola y sin saber. 

Tengo miedo a no volver a sentir cuando te desvanezcas del todo... y en tu lugar tenga un espacio vacío y frío, sin recuerdos, no tendré ya nada... 

Pero necesito creerte, te necesito para respirar y sentir, que todo no sea en vano. Detrás queda mi sin razón, la locura y el miedo... 

Ya no quiero estar más aquí, sin saber dónde estás y por qué no me escuchas, tan lejos te fuiste... 

Tengo frío y quiero tu calor, no tu indiferencia y mi frustración... que tus labios me besen por primera vez de verdad, y me abraces...

Ya no quiero estar más aquí, porque tú no estás conmigo, porque no te tendré más ... te fuiste otra vez de mi lado, como siempre... 

Y ahora que no puedes ser mío es cuando quiero tenerte...

DÍA 26

- DÍA 26 - 

Yujuuuuuu!!!!!. He bajado de los 32 minutos. Estoy muy contenta, ya que hoy he corrido fenomenal, he disfrutado y no he ido al límite, por lo que estoy muy satisfecha... 

He visto al viejino y hoy iba paseando al perro. 
Ese perro que me tiene manía y que cada vez que me ve sale detrás. 
La verdad es que, cada vez que veo a ese perro, mejoro mi marca, porque me hace correr más deprisa y casi sin esfuerzo para escapara de él... y el muy... (?) del viejino se troncha de la risa y ni lo llama ni nada para verme dar saltitos, a la vez que zancadas... Si es que debo de estar muy graciosa... 
En fin, que llevaba puesto (el viejino no el perro): un gorro de lana calado hasta las orejas, una bufanda que le daba 300 vueltas al cuello, un abrigo con las solapas levantadas y unas zapatillas de cuadros de esas de estar en casa... unas pintas. 

Y me dice: 
- “Pero a "honde" vas tan "desabrigá"... que te me vas a constipar...”

Y claro, no he podido resistirme y le he contestado: 
- “Pero es que usted va a coger el sarampión, de tan abrigado...”. 

A todo esto, nos hemos hablado a voces, por todo el parque... menos mal que no había nadie... Bueno, hasta el miércoles!!

domingo, 17 de noviembre de 2013

MI CONOCIDO DESCONOCIDO...

¿Por qué será que sus ojos me seducen tanto?

No son especialmente bellos, ni su forma, ni color, como de tierra mojada, 
pero desprenden un calor especial... 
Imagino quién es cuando me mira, un instante, fijamente, para apartarse seguidamente, como nervioso de que descubra sus secretos detrás de esos ojos...

¿Y su voz? 
Al escucharlo a través del espacio es como si sólo existiéramos nosotros... 
Mis palabras se pierden e intento retomar el tiempo con banalidades... pero es irresistible... 
Se acaba y el terciopelo de su voz se escapa entre los cables dejándome fría un instante... Por eso cuando está de frente, las palabras se me pierden, entre frases y risas que nada tienen qué ver con lo que siento... 
Es un enigma, un acertijo que, desde lejos observo... mi conocido tan desconocido... llegar a él será toda una aventura...

Mientras tanto, me da por soñar, con lo que sería y no será nunca... 
Tan serio y misterioso, todo por descubrir. 
Desprende de él un ligero aroma a perfume masculino, a limpio y a jabón...
Y cuando se decide a hablar, con esa media sonrisa... que, a veces, le llega a los ojos cuando me mira... tan profundo y sincero, tan lleno y romántico... tan solo y soñador...

No puedo dejar el tiempo entre nosotros sin tener un instante siquiera en el que poder estar en su mismo espacio y respirar el mismo aire, para dejar mi estela en su alma, de tal forma que, cuando me voy, me queda el regusto de su sabor en mi boca...