martes, 30 de septiembre de 2014

DÍA 74. Día 6 del año 2

DÍA 74
Día 6 del año 2

Parece mentira que después de una semana sin correr, por culpa de una faringitis con tos aguda en toda regla, haya hecho tan buena marca. O al menos a mí me lo parece. Aunque al final del recorrido, y cuando llevaba 4 km y medio, he pensado en parar. 
Pero de pronto, y a pesar de los cascos y la música de Metálica a toda mecha, he escuchado: "pero si vas arrengáaaa.... que ya no puedes ni con las zapatillas... Rubiaaaaa!!!  que te va a dar algo...!!!". Volteo la cara hacia las voces y descubro entre los árboles a tres de mis viejos conocidos de la tercera juventud. Llevaban los garrotes en la mano, enarbolándolos por encima de sus cabezas y riéndose a mandíbula batiente... 
Por mis... que no les iba a dar el gusto. 
Y por ello, he conseguido terminar los cinco kilómetros previstos y en 36,51 minutos, que no está nada mal, teniendo en cuenta que, hasta ayer, tosía de tal manera que casi me daba la vuelta. 

Hoy me he metido otra vez, por las profundidades del parque... 
La verdad es que es una maravilla. 
Han talado algunos árboles y los troncos los han convertido en bancos rústicos. Hay uno en cada vereda, en cada recodo de los caminos, y que invitan a sentarse a descansar a todo aquel que se preste a venir a disfrutar de la naturaleza. 
Aunque, la verdad es que hoy, ha hecho calor. 
Los bichinos me han perseguido por esos caminos. Creo que había un vigía apostado en un rincón, y cuando me ha visto llegar, ha llamado a sus compinches y me han hecho la carrera imposible durante un tramo. Son unos incordio. A cambio, me he comido un millar de ellos en venganza...
En fin... a pesar de todo, creo que en poco tiempo volveré a hacer 6 km. Me encuentro con fuerzas y con muchas ganas... 

sábado, 27 de septiembre de 2014

PODÍA TOCARLO...

- 305 -

Podría alzar la mano 
y casi tocar ese pensamiento con la punta de los dedos. 

Aquel desorden en mi mente 
con esa mezcla de olores a limpio, 
invadiendo mi espacio dándome ráfagas de vida 
en la cumbre del cielo que me miraba y me intuía. 

Soñaba y nacía de nuevo, 
entre la brisa del mar y el viento que tumbaba los árboles... 
Todo era verde y sin embargo mi interior se teñía de azul... 

Como tu sombra, una vez que me alcanzaste, 
Como tu abrazo cuando me rodeaba y me protegía... 
Era la comunión entre nosotros 
lo que me hacía volver a sentir... 
una y otra vez... 

Y casi podía tocarlo... 
hasta poder desaparecer contigo entre la noche... 
Para disolverme entre los pinceles de tu paleta, 
fundiéndonos en un cuadro mágico...


viernes, 26 de septiembre de 2014

AL DESPERTAR...


- 304 -

Salía de vez en cuando a la superficie, aspiraba una bocanada de aire y volvía a sumergirme… como si fuera a ahogarme entre tantas palabras… 
La voz susurrante del viento, comenzaba a escucharse quedamente en el pasillo, se colaba entre las rendijas de una puerta desvencijada y mal encolada… El frío pasaba por todos los quicios de las ventanas llenando el espacio de vaho… 

De pronto, una sombra se coló entre los naranjos del patio, llegando a invadir parte del porche de la entrada. Yo me aposté detrás de los visillos para ver sin ser vista, expectante, con el corazón encerrado en un puño dentro del pecho y los latidos queriéndose salir de mi cuerpo, agarrotado entre el frío y el miedo… 

Mi grito mudo desgarró la noche. 

Se escuchó el estruendo del mar cuando moría entre las rocas y sentí que la vida se me llenaba de incertidumbre y pesar...

Pero al abrirse la puerta, entró a raudales el sol con su manto de luz y el calor de las miles de motas de polvo que cubrían los muebles… Una ráfaga mágica, como un rayo, despertó el hielo que me envolvía y sentí el hormigueo del despertar de mi piel, estremeciéndose al contacto con aquel cuerpo vivo que me abrazaba. 

Un beso, un cálido sabor en la boca, y todo volvió a ser como esperaba. Alcanzando de nuevo la esperanza, mi casa se llenó de color.

Transformándome de crisálida a mariposa, pude volar otra vez…


miércoles, 24 de septiembre de 2014

CUANDO ÉL LLAMÓ...

- 304 -

Cuando él la llamó, no sabía qué voz poner…

Era tal la emoción que le subió desde su estómago, que aquellas mariposas siguieron revoloteando toda la tarde en su interior. Por fin había dado el paso, por fin tenían una cita.
Según se acercaba el momento, le temblaban más las manos y un sudor frío recorría su espalda. No sabía qué giro daría su vida después. Sus esperanzas estaban puestas en el reloj de la mesilla, aquél que no paraba de sonar melancólicamente, con su tic-tac monótono y quedo…

El silencio, de pronto se apoderó de ella… No sabría estar a la altura, las dudas y los temores llenaban su mente pensando si él también sentiría lo mismo. Se comportaba como una novia reciente y nerviosa; con el ir y venir de los pasos resonando entre aquellas paredes vacías.

Durante mucho tiempo, sólo existieron las cartas y las llamadas esporádicas. A veces, el olvido amenazaba con volver.

No sabía qué vestido ponerse para parecer más joven, más guapa, más interesante…

De pronto el timbre retumbó en su casa solitaria y oscura. Dio un paso, después otro… La garganta le escocía con las primeras lágrimas a flor de piel. Él lo era todo,  y ella le esperaba…

Cuando abrió la puerta y le miró a los ojos, a aquellos ojos grandes y fijos, tan parecidos a los suyos; cuando descubrió su cara entre la nieblina del recuerdo; cuando pudo besar sus manos y tenerle entre sus brazos, recordando cómo le cantaba cuando era pequeño, recordando sus besos pegajosos de azúcar en la piel; sintió que aquel niño se había convertido en un hombre…

Aquel orgullo le supo a poco. Notó ese primer trago de sal en la boca del estómago, cuando su mirada se enturbió y ya no pudo parar de contener sus emociones…

Después de tantos años… el hijo, por fin… había vuelto. 


martes, 23 de septiembre de 2014

CON LA VIDA EN LA GARGANTA...

- 303 -

Con la vida en la garganta, queriendo gritar al viento… ese leve parpadear del aire entre mis dedos, y la música que se escapaba de puntillas en mis oídos…

Nada parecía ser como antes. Donde la tierra era estéril y ahora se cuaja de verdes intensos que desprenden su aroma jugando con las huellas de mi destino, injertadas en la tierra húmeda…

Los charcos en el suelo, me devuelven el reflejo que nace de los árboles y me cantan,  a lo lejos, con su suave vaivén…

Una gota de lluvia se escapa de una hoja, por encima de mis pensamientos y emergen multitud de colores vivos que envuelven la gota y la cambian de luz…

Como una lágrima de gratitud, una porción de tarde de otoño que me invita a correr entre la magia y la realidad que llevo en mí…


DÍA 73. Día 5 del año 2

DÍA 73
Día 5 del año 2


Hoy he salido a correr y a lo mejor no debiera haberlo hecho. Más que nada porque aún me dura el constipado que arrastro desde el viernes… con dolor de garganta, afonía y demás (por lo de cantar ópera… jejejeje), y encima ahora, agravado con la aparición de mucosidad de leve a moderada, con algo de estabilidad en ojos llorosos y tos cavernosa y atronadora (a lo camionero…). 

Además, el Edmundo parece que no se lleva bien con la Nave Nodriza ésta que me han mandado, y que parece ser que es un móvil, pero a mí me da la impresión de estar hablando por una Tablet… 5 pulgadas nada menos que tiene, por lo que apenas me cabía en el bolsillo. Cuando empecé a correr todo iba bien… pero a los pocos minutos, recibo un mensaje que me dice que el satélite del programa del Edmundo, NO ME ENCUENTRA… pero… si tiene 5 pulgadas el cacharro éste!!! Cómo no me va a encontrar???... Ainssss… estas altas tecnologías que tontas son a veces…
 
Así que he decidido seguir corriendo y no hacer caso del Edmundo, tampoco iba a mejorar mi marca dado el estado “trancazo” que aún anida en mi cuerpo. 

El césped estaba mojado y me he dado un resbalón de los que hacen época. Y es que por fin, casi hago el spagat de ballet, ese que consiste en tener una pierna en Cuenca y la otra en Portugal (visto desde Cáceres, claro)… Pero, creedme que he podido ver cómo una pierna revoleaba por encima de mi cabeza y se posaba con dulzura tres pasos por delante de mí… Ni la Paulova lo hubiera hecho mejor… 

Y, de pronto, un cosquilleo tal en la nariz, que me ha provocado un estornudo descomunal!!!… Bueno, ha sido tan espectacular, que casi me doy la vuelta…!! Me lloriqueaban los ojos y cuando he podido despejar la nariz de mucosidad estruendosamente, me he dado cuenta, que la vida en el parque se ha paralizado… Oye, todo el mundo mirando… como si no hubieran visto estornudar nunca a nadie… De acuerdo que casi me caigo y todo, de lo fuerte que ha sido (no sería la primera vez…)… pero de ahí a ser algo extraño va un mundo… 

En fin… supongo que los habituales al parque deben estar ya más que acostumbrados a estas cosas mías...

lunes, 22 de septiembre de 2014

DECIDÍ...

- 302 -

Decidí alejarme y cerrar los ojos... 
decidí soñar el último pensamiento y volar libre... 

¿Para qué cosí mis alas tan fuerte? 

A veces tengo miedo y decido no saltar. 
Pero luego me lleno de aire 
y salto al vacío para encontrarme en el camino. 

Un grito rasgado me nace en la garganta, 
desde la base de la tarde 
hasta el rugir del anochecer... 

Nada es lo que parece, 
nada parece lo mismo... 

Decidí cambiarlo todo y volver a ser yo,
más libre y más feliz...

con aquellas alas que me prestaron y aprendí a usar... 
con aquellos sueños rotos que decidí encontrar otra vez...

Para tenerlos contigo, para ser tú,
lanzarlos al aire, volviendo a tu lado.

Decidí quererte y ya nada será igual...


sábado, 20 de septiembre de 2014

ENREDADOS EN TUS SUEÑOS...

- 301 -

Cómo se endurecen las nubes 
sabiendo que en un segundo todo se volverá negro. 
Despertando de una fantasía,
pasando a un estadio de luces a sombras...

En tus lágrimas me mezo
queriendo aligerar el dolor. 
Entrando en tus ojos y llenándolos de luz... 
y conseguir una ligera sonrisa 
abriendo paso a la esperanza. 

Llanos y fuertes abrazos amigos... 

Te llevas contigo las notas del adiós 
pero no el hasta siempre. 
Volviendo cada vez que leamos, 
cuando tu recuerdo vuele hasta nosotros 
en los que algún día 
tu presencia llene este espacio hueco... 

No consigo encontrar el momento 
por donde no sentir que ésto es una despedida más. 

Tal vez sí sea el hasta siempre manido. 

Aprendiendo y reciclando sentimientos. 
Queda la realidad y el sueño incumplido
que se materializará en otro sitio, 
bajo otras estrellas, 
haciendo luz por donde pises, 
llevando tu verdad y tus ilusiones en los bolsillos. 

Regálanos las ganas de empezar otra vez. 
Con otra visión.
Comenzando a romper un nuevo horizonte 
en el que serás capaz de hacer estallar ese velo negro, 
que ahora nos rodea. 

Encontrar tu espacio dando cobijo a todos los que aquí quedamos, 
de alguna manera, 
enredados en tus sueños...

Gracias por haber contribuido a hacer realidad el mío...

jueves, 18 de septiembre de 2014

PARA NO PENSAR

- 300 -

Este devenir sin ganas... 
provocando un sin fin de sensaciones 
burbujeantes en mi cabeza... 

Sin dejarme pensar...
Hastío y calor. 
Me siento separar el cuerpo del alma 

para no sentir el dolor... 
Dolor físico y sin karma, 
dolor localizado y resentido... 

Todo me envuelve en un dejarme llevar sin fuerzas... 
Para no tener que pensar. 

Se localiza en un eco de mi mente, 
la magia que permite abrir espacios entre las sombras
volviendo a ser yo, avanzando lentamente, 
entre los recovecos de la tarde 
en la que estoy deseando llegar 
resguardándome de la lluvia... 

Perderme entre los besos perdidos. 
Soñarme entre los abrazos soñados 

y no despertar en un tiempo muerto... 

Encontrándome segura y plena, 
una vez que hayas regresado conmigo...


miércoles, 17 de septiembre de 2014

DIA 72. Día 4 del año 2


Día 72 
Día 4 del año 2 

Qué pocas ganas tenía de salir hoy... Estaba perezosa, perezosa... Aún así, me he arrancado del sillón y he salido... Y mira que lo tenía todo a mi favor: 

Clima: Nublado con mucho sol (a las 11 h.), sin demasiado calor. 
Lugar: El más bonito para mí. 
Cuestas: Las justas y necesarias. 
Dolores: Ninguno, ni molestias tampoco. Ni si quiera la pequeña gota de aire que vive en mi cuerpo y que va a su libre albedrío. 
Hora: Perfecta. Aunque un poco más tarde de lo habitual, sin demasiada gente... 

Todo era ideal y giraba en pos de mi beneficio, pero no me encontraba bien. No sé por qué. En un momento dado pensé en parar e irme a mi casa. Pero las endorfinas empezaron a pulular a mi alrededor. Me acordé de lo que escribí el otro día sobre "un paso... un paso más..." , cambié de circuito y me aventuré a hacer toda la vuelta al Parque... y cuando quise mirar al "Edmundo", ya había llegado a los 5 km... Bieeeeeen....!!! 

Aunque por los sitios por los que he ido, están muy solitarios. En algunos tramos no se distingue ni el cielo de tan tupido como están los árboles... Y da un poco de reparo. Además, pensaba que con las fuerzas tan justas, si me daban un susto, no podría correr más deprisa... 
En fin... que después de todo... acabé con un kilómetro más sin darme casi ni cuenta.

martes, 16 de septiembre de 2014

LLUEVE...

- 299 -

Llueve...
y de vez en cuando... grita también.
Los cristales me devuelven la ilusión a la música del cielo,
con su tintineo y el grosor de las notas
difuminándose entre medias.
Llueve...
cayendo con furia a veces.
Con media luz y el tiempo apagado...
Al compás de mi sonrisa que surge entre las ventanas...
Llueve...
y calma mi corazón...
imaginando el sabor de la tierra entre los árboles verdes,
soñando con las alas puestas dispuesta a volar otra vez...
Mientras tengo la claridad del horizonte
y gotean poco a poco los regueros del otoño a flor de piel...
Llueve...
y me nace la esperanza de que todo vuelve a su sitio,
con sonidos que retumban en mi calle,
con furia y voces al viento...
para que se escuchen en esta tarde gris que me acompaña
y me llevan a un segundo de felicidad pura...
Llueve...
para pensarte y añorar que ahora no estabas conmigo...

UN PASO...

- 298 -

Un paso… 
sabor a limpio y a mañana fresca, 
un paso, 
una gota de aliento en la dificultad. 
Llegar a una meta y saborear el tiempo. 

Otro paso, 
una zancada de vida. 
Necesidad de tararear la música 
que se mezcla entre la arena y la hierba. 
Ganas de llegar al agua 
que calmará mi sed. 
Humedad y tierra mojada. 

Otro paso más. 
Para llegar a mi destino y poder descansar. 
Más sonidos cortos y lejanos, 
el susurrar de los árboles que mascullan al pasar… 
Una última inhalación, 
para dar un paso. 

Final del trayecto 
en el que los sueños van por delante de mi respiración. 
Subir, bajar. 
Dejar atrás el cansancio y sonreír. 
La mañana me regala las nubes blancas 
y las gotas del amanecer que aún reposan. 

Se para el tiempo y mi cuerpo responde. 
Dos pasos más 
y llegaré por fin. 
El tic-tac del reloj. 
Para demostrar que se puede. 

Vale la pena el esfuerzo. 
El sudor con los pasos dados. 
La sed y el latir de mis venas. 
Un paso… 
Un paso más…


lunes, 15 de septiembre de 2014

DÍA 71. Día 3 del año 2

DÍA 71
Día 3 del año 2

4 Km. en 28,15 minutos. No ha estado mal. En la línea del último día. 
He tenido que andar durante dos minutos en el kilómetro 3, porque el pequeño gas, del cual ya no me acordaba, ha vuelto. 
Estaba dormido y aletargado, instalado cómodamente bajo la axila derecha. Y en un momento dado, ha querido hacerme saber que no se había ido. Qué fastidio...!! Yo lo achaco a la hora del desayuno, que tal vez hoy, haya sido un poco más tarde de lo habitual y por consiguiente no había terminado de hacer la digestión. 
En fin. Por lo demás muy bien. 
Al bajar al Parque, me ha olido a pollo frito. A ese pollito fritito, fritio, con mucho ajo machado y perejil... de ése que te pones a roer los huesos y los quedas pelados del todo... Qué rico...!!! Se me iba haciendo la boca agua... salivando y dando tragones... Uyyy... pues a lo mejor, de tantos tragones que dí, la bolita de aire hizo su aparición... Sí, debió ser eso. 
Por lo demás, hacía una temperatura espectacular para correr. 
Y en el cielo, se podían apreciar una gama de nubes variadas que hubieran hecho el deleite de cualquier artista que se precie y al que le guste pintar cielos... Iban de un esponjoso y aterciopelado color blanco, al gris más tenue y romántico posible... La hierba desprendía aromas inigualables a frescor y a mañanas limpias... 
Sólo me crucé con unos cuantos viandantes y corredores, entre ellos un amigo al que saludé varias veces... Luego vuelta a casa por esas calles, que me ha costado un mundo subir... Ya no tenía ni ganas de dar un paso más, pero sólo el pensar en mi sillón favorito, hace milagros en mí... 

jueves, 11 de septiembre de 2014

DÍA 70. Día 2 del año 2

DÍA 70
2 día del año 2


4 km en 28 minutos. Dos menos que el día anterior. Y esta vez corriendo todo seguido, sin andar ni un solo tramo.
Creí que no iba a poder correr a gusto, después de levantarme hoy con unas agujetas horrorosas...!! Pero fue empezar, (además de hacerme efecto el ibuprofeno, claro) y quitarse el dolor en un pis-pás... 
Al principio creí que las molestias en los gemelos pudieran ser una sobrecarga... Pero en un ratillo se me pasó, y lo achaqué a las agujetas. 

Por lo demás, ha sido perfecto. 
Me encanta salir a correr por las mañanas. 

Hoy hacía una temperatura adecuada. La hierba estaba mojada y olía a tierra húmeda... Casi cierro los ojos de puro deleite, pero al primer tropezón dejé el deleite para otra ocasión y me centré en disfrutar de la carrera... Lo mejor de esta hora es que no hay bichillos que echarse a la boca. Se conoce que están aún dormidos y no se esperan que yo pase por allí... Los echo de menos, aunque parezca mentira...Son ya, como de la familia. 

Al regreso, y con el cansancio en el cuerpo, me acordé del exhibicionista que decían haber visto por el parque. Si llego a verlo, no me salen improperios por la boca... sólo resoplidos y bufidos... seguro... Ni si quiera hubiera podido salir corriendo, de tan exhausta como me encontraba. Cuando subía por esas calles, me acordé del aroma a bollas de chicharrón que se esparcía por allí, cuando bajaba a correr... Esos granitos de anís... la manteca de cerdo y el azúcar quemado por encima... Uhmmm.... pero ahora, en el regreso y con media respiración en el cuerpo, esos olores ya no me parecían tan apetitosos. Me acordé que ese dulce era pesón, pesón... y se me quedó el recuerdo, como una losa, pegado a la garganta... De tal manera que no podía ni respirar... Ufff... con lo rico que parecía al principio y lo empachoso que me resultaron sus efluvios al regresar... Lo que hace media hora de carrera...!!

miércoles, 10 de septiembre de 2014

SENSACIONES...


- 297 -

Descubrir el olor a limpio y manejar los aromas de la tierra, en tanto en cuanto mis pasos suenan entre la hierba fresca y la música de colores que suben y suben hasta llegar a mis sentidos e inundarme de vida otra vez. 

Una mezcla de luces y olores, 
colores limpios, 
armonía de notas,
esencias de palabras no dichas...
Cargada de energía… 

Un camino que reconoce mi sombra y mi aspecto, para descansar el cuerpo más tarde entre árboles y fragancia a verano recién cortado. 

Escuchar tu voz era lo único que me faltaba para enmarcar el momento idóneo de esa sensación a juventud y vida… 
Y cuando me llegó por fin, todo encajó en su lugar para dar la vuelta a los sueños y comenzar otra vez tan pletórica y repleta de sensaciones libres y mágicas que, de nuevo, llenan mi cuerpo y mi alma de granos de luz y alegría…

martes, 9 de septiembre de 2014

DÍA 69. DÍA 1 del año 2

- DÍA 69 -
- Día 1 del año 2 -

Después de dos meses de inactividad (el último día que salí a correr fue el 2 de julio), pensé que me iba a costar un mundo. Pero me he encontrado tan a gusto, tan libre y tan llena de ganas que a penas he reparado en el cansancio, la falta de tono o los posibles calambres o pequeñas molestias que, a veces, me acompañan en la carrera. He salido con la mente abierta y las ganas a flor de piel, para encontrarme otra vez en el parque. La verdad es que correr por las mañanas me gusta y me cunde más... Tal vez porque el cuerpo y la mente están descansados y no notas tanto el cúmulo de "cosas" que vamos transportando en nuestras mochilas según avanza el día. 
No he querido salir a hacer kilómetros, porque intuía que no iba a dar la talla. He querido empezar por tiempos y correr media horita. No ha estado nada mal. Me he ido encontrando cada vez más a gusto. 
Lo peor es que acumulo tres kilos de más en mi cuerpo y eso se nota: Una parte de esos tres kilos están alojados en el culete. Lo noto al correr que me pesa más... (jejeejejeje), pero también en el pantalón de deporte que se ciñe más a mi cuerpo y me aprieta un poco en la cintura. 
Otra parte de los tres kilos los noto en el pecho. Eso es algo que siempre me pasa, adelgace o engorde, todo se va o se quita de ahí. A la hora de correr es un poco más incómodo tener algo más de lo habitual, pero un buen sujetador para corredoras lo soluciona. 
Y el resto de kilos acumulados los debo tener en los carrillos o mofletes (de la cara, se sobreentiende). Que por qué digo ésto?. Cuando corro, llevo una respiración acompasada, aspirando por la nariz y expulsando el aire por la boca, hoy se me movían los carrillos mucho más que antes. Parecía que iba resoplando como un caballo (en ese caso relinchando... pero como un caballo percherón). También puede ser que, después de tantos días de inactividad, iba sin resuello... 

Al regresar, escuché el sonido de una olla exprés de las antiguas... esas que van dando vueltas y hacen un ruidito característico: tututúuu... tututúuuu.. tututúuuuu..... y un aroma a alubias con ingredientes prohibidos para los que tenemos colesterol, invadía el ambiente de las calles... Allí estaba otra vez el olor a pueblo, a rico, a casa... 
A pesar de ser temprano e ir con la hora del desayuno, mis tripas protestaron ante tanto aroma a cocina de siempre... protesta por no poder probar tan ricas viandas, con la promesa de una mesa bien puesta, una hogaza de pan y un plato de alubias con.... tocino, carne, chorizo, oreja... 
Qué lástima... Hoy para comer tendré un triste filete de ternera a la plancha...
Y es que, desde hoy, he prometido cuidar mi alimentación en la medida de lo posible... Esos tres kilillos de más, tienen los días contados...!!!

sábado, 6 de septiembre de 2014

DONDE SE PONE EL SOL

- 296 -

Donde se pone el sol y la noche da los primeros alientos de vida,
busco entre tantas miradas
aquella que se acerca con las luces incipientes,
y que hace que las sonrisas jugueteen en mi cara…

Aquel pensamiento naciente que ronda la tarde
deshilvanándose en profundos surcos
medidos en los arcos de mi existencia,
rodando el paisaje y llenándolo de luz.

Para cuando tus ojos se posen en los míos
y me ofrezcan la bienvenida otra vez.

Es la magia que se esparce entre tú y yo
y que sin comprender nos cobija entre los brazos
haciéndonos desaparecer entre las nubes…

Estadio de vida, luces y sombras entre nosotros,
mientras se forjan los minutos y te espero…siempre…

martes, 2 de septiembre de 2014

AQUELLAS...

- 295 -

Aquellas sensaciones que sobrevolaban las tardes de septiembre... 

Aquellas con las que dormía todas las noches y guardaba como un tesoro... 
Se mezclan ahora, con trazos de mi día a día, 
envolviéndolas con los sueños que una vez tuve y que ahora se hacen realidad. 

Las noches suaves y llenas de risa, 
entremezclan las palabras y las ideas, para hacerme saborear la vida...

Emociones y música flotan entre nuestras miradas 
haciéndonos partícipes de un nuevo espacio para nosotros aquí y ahora. 

Forjando caminos entre los pasos que vamos dando juntos...

lunes, 1 de septiembre de 2014

FORMANDO PALABRAS...

- 294 -

Me pego a tu sonrisa para ir descubriendo los minutos que pasamos juntos... 
Me centro en tu mirada y me vierto dentro de ese agua que limpia tus ojos con el brillo a flor de piel... 
Me pierdo entre tus brazos y encuentro un nuevo lugar en el que está mi casa y mi consuelo...

Sueño entre la luz que se escapa de mi pensamiento, rozando un beso prometido. 
Me enredo entre las imágenes de color que me dan fuerza para seguir entre tus ojos y las letras... 
Te siento con el corazón, porque aún no has llegado, 
estando a mi lado aunque no te roce, con suspiros entrecortados. 

Me enciendo en la claridad de tus pasos al regresar a mí... 
Esperando para verte llegar en este momento, 
cuando la tarde se pierde y la noche nos envuelve con esa mágica música... 

Me centro en tu pensamiento dándole vueltas a mil preguntas 
que, solas, se contestan y me responden.
Me guío, finalmente, con tu voz anidada entre los dedos, 
formando las palabras que nacen de una poesía...