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El lejano sonido de una
canción conocida iba haciendo mella en mi memoria... hasta llegar a
cubrir parte de mi pasado con una connotación del presente...
Porque no todo era igual.
Yo había cambiado, algo en mi interior no estaba en el mismo
sitio...
Logré confundir mis
propios sentidos y llegar caminando hacia el final de aquella
carretera empedrada que era mi vida. No quería profundizar en los
pensamientos amargos de un tiempo que ya no volverá... y que eran de
un color gris intenso, porque sólo llevaban recuerdos en su interior
que no siempre eran veraces...
Se confundían con lo que
quise que fuera y nunca ocurrió...
Mientras, los días que
pasan me convierten en una sombra de lo que siempre fui, mi alegría
se torna en ráfagas que sólo existen en la superficie, pero que si
se escarbara más profundo, aparecería un sinsabor amargo.
Una leyenda de historias
mezcladas con mentiras negras... No aprenderé,
Sin saber dónde llegar y
qué hacer cuando recaben allí mis razones y mis miedos...Con
un ataque en toda regla a mis temores, abordo el problema acariciando
el pasado para ver si con ello, se convierte en este presente que
anhelo...
Quizá
cuando lo tenga entre las manos, lo desdeñe tal y como he hecho
tantas veces...
Mientras
tanto, se cuelan en mí esos sentimientos hacia lo desconocido, y me
imagino tener todo el universo, aunque no sea cierto...
Al
final, levanto la vista y veo cómo él... se aleja de mi lado...
