16ª DIA
Por fin hoy he salido a correr y me he reencontrado con todas las sensaciones buenas que me dejan estas endorfinas que se liberan en mi cuerpo.
La verdad es que todo estaba igual, un poco más solitario, pero supongo que es por el tiempo.
Dos o tres perros con sus respectivos amos, algunos caminando, otro corriendo, y poco más...
Bueno... y mi viejino, que también andaba por ahí.
Resulta que casi “jocico” (dícese de la acción de aproximar el suelo con el “jocico”), de un tropiezo y cuando levanto la vista (para ver si alguien me había visto y pasar un rato de vergüenza...), ¿a quién me encuentro riéndose? Pues a mi viejino que va y me grita:
“que te me vas a caer, hermosa...!!”.
Entre el corte y el ataque de risa que me dio, me produjo una tos que hizo que acelerara un poco para alejarme de allí e inmediatamente instalar alegremente la pequeña motita de gas en mis costillas, que fue subiendo hasta el omóplato derecho (su lugar favorito) y quedarse ahí hasta el próximo día.
Por cierto, he bajado un poco mi marca...nuevo récord. Bieeeeeennnnnn!!!!
y de los 300 millones de bichinos, ya no quedan más que 100. El resto forma parte de mi organismo. Me los he comido todos.
Hasta el viernes.