No sabía tejer las letras que
iban dando forma a una idea.
Las palabras se amontonaban en una dicotomía de
formas y maneras…
Dando relieve a la historia que conforma su vida y su entorno…
Qué fuerza tienen las palabras a
veces…!
Le enrevesan y le envuelven para confundirle o le atrapan para hacerle
sentir…
Sentir…
Cuando estaba vacío y
llegaba al dolor,
convirtiendo la frase en realidad, cambiando su mundo poco a
poco…
Llenándolo de verdad, de imágenes
claras y coloridas,
como de pinceladas de sentimientos que podían encontrar su
camino.
Las palabras y su fuerza.
Para
narrar un sueño, transformándolo en vida.
Dando una esperanza a su mundo,
que
lentamente se vuelve a poner en pie, encajando las piezas rotas…
Por cómo se traducen, y me
recuerdan el espacio en el que estoy también,
las palabras me dan la fuerza
para poder llevárselas ahora que las quiere con él…