DÍA 86
Día 18 del año 2
Hoy he salido ha correr. Me gusta por la mañana, no sé por qué. El parque tiene un aire a despreocupación y a no tener prisas. Por las tardes, al ir apurada por la caída del sol, no me siento tan libre.
Hacía frío, pero de las tres mangas que llevaba, al poco rato ya me sobraba una.
He llevado un ritmo magnífico, parecido al del otro día por tiempo, no por sensaciones, ya que me molestaba la pierna izquierda un poco. Aún así, creí que invertiría más o menos el mismo tiempo que la carrera anterior, hasta que, en un tramo recto, sin piedras ni troncos, ni baldosas levantadas, después de 86 salidas completas a correr, al fin se cumplieron los pronósticos y ME HE CAÍDOOOOO...!!!
Joooo, no ha sido muy aparatosa, pero he llegado a estar completamente tumbada boca abajo en el suelo, mi barbilla incluso ha rozado el piso, pero ha sido a cámara lenta. Como aquella que lo lleva ensayando millones de veces, emulando a mi gran amiga Mari Paz, cuando estas navidades se cayó en la Parte Antigua. Claro que a ella "la ayudaron" un poco, y a mí no...
Lo primero que he hecho ha sido, evidentemente, mirar para todos los lados para comprobar quién o quienes se habían percatado del evento. Una vez recabado los datos, verificando que nadie se había dado cuenta, porque no pasaba nadie por allí, lo segundo que ha evaluado mi cerebro han sido los daños físicos o materiales incluidos en la caída.
Para bien mío, no ha habido que lamentar nada, no me había torcido ningún pie, ni tenía golpe alguno, las mallas estaban intactas y la voz cantarina que me acompaña todos los días, en ese momento me anunciaba el segundo kilómetro recorrido, por consiguiente, tampoco estaba dañada.
Lo peor es que he invertido un tiempo precioso que me ha retardado en mi marca.
Qué le vamos a hacer!!
En fin, por lo demás, ha sido una carrera casi perfecta y me encuentro satisfecha y feliz. 5 km en 34,11 minutos.
Ahora, cuando los músculos se calmen y se enfríen, veremos a ver si hay efectos secundarios después del mal paso dado...
El lunes probaré otra vez...