DÍA 37
No he acabado los 5 km.... snifff!!! Con lo bien que iba!!,
No me molestaba nada en ningún sitio (cosa rara)... e iba haciendo buena marca, hasta que Edmundo se ha constipado y ha dejado de funcionar... tendré que llevarle al médico para ver qué le pasa... se pone a toser, oye... y no hay quien le aguante...!!!
Y hoy sí que se corría bien; porque, exceptuando a dos o tres corredores esporádicos y dispersos..., NO HABÍA NADIE MÁS...!!!!
La tarde se estaba arrugando por momentos, hacía frío y un airillo helado se colaba entre los árboles...
El suelo estaba lleno de charcos y embarrado en algunas zonas, por lo que había que ir esquivando los más profundos.
Pero el cielo... ay, el cielo...!!! era como un lienzo de varios tonos de colores que iban desde el gris más oscuro, pasando por el azul pálido y el blanco en el que se formaban las nubes que iban y venían al compás del viento... y de repente, un trozo de azulón estático que parecía pintado con acuarelas... difuminándose en varias tonalidades... Precioso, porque detrás todavía había algún rayito de sol que se colaba entre las austeras nubes, dando a la tarde un aire mágico muy especial...
Así da gusto correr...
Pero de repente, he empezado a notar molestias en el gemelo izquierdo y he tenido que parar, recoger mis emociones, al maltrecho y enfermo de Edmundo y regresar a casa...
No hay comentarios:
Publicar un comentario